viernes, 21 de enero de 2011

Del precio y el uso del agua

Dicen que la nueva ley de aguas de Galicia está al caer, y que significará una subida enorme del precio del agua. Lo cierto es que la Directiva Marco del Agua  ya establecía hace más de una década que el agua había que pagarla con la factura y no con los impuestos, que subvencionar el agua desde los gobiernos sólo lleva a su derroche.
Y es que el agua es barata, demasiado barata: a menos de un euro por metro cúbico, a 0,001 € el litro de agua potable. Si pensamos que a veces pagamos un euro por un botellín, hablamos de 1000 veces más barato que eso. Por embalsarla, tratarla, distribuirla, recogerla, llevarla a las EDAR y depurarlas antes de su devolución al medio natural. No parece muy caro.
Además, si nos parece caro siempre podemos gastar menos. Existen medios para ello: perlizadores, reductores de caudal, cisternas de doble pulsador, alcachofas de ducha ahorradoras... sistemas que nos permiten ahorrar hasta un 50% del consumo habitual sin darnos cuenta, con el consiguiente ahorro de energía en el caso del agua caliente.
Me sorprende la tendencia de nuestra sociedad a quejarnos y no actuar, la escasa capacidad de muchos para reaccionar y arreglar las situaciones que tienen arreglo. Bombillas de ahorro y perlizadores son las armas adecuadas para enfrentarnos a estas subidas de tarifa en luz y agua. A su vez, las subidas de tarifa son la única herramienta de los gobiernos para que ahorremos agua y energía, que no sobran en nuestro país.
Consolémonos: no se trata de pagar mas, sino de pagar de otra manera: ¿quien cree usted que estaba pagando la diferencia hasta ahora? ¿el presidente de su bolsillo? Se trata sencillamente de saber cuánto cuesta realmente lo que consumimos (¿y actuar en consecuencia?), en vez de gastar de más sin saber el precio, y pagándolo a través de nuestros impuestos, que tienen mejores sitios adónde ir.

1 comentario:

  1. Abrin os ollos.
    Amencía.
    Pecheinos e esvarei por unha valgada,
    desfacendo o camiño da nenez,
    no ronsel dunha libeliña...

    Abrin os ollos.
    O rio.
    Agora música, vida.
    Pecheinos e sentin o recendo dunha tortilla ainda quente.
    Miña nai berraba
    -vai lavar as mans que imos comer.
    (os pícaros nunca teñen as mans suxas)

    Abrin os ollos e ollei
    a estupidez humana
    A miña estupidez
    a propia

    no espello da auga.pecheinos

    o rio era un leito lamacento
    de pedras e moscas verdes

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